La Hora Santa. Santísimo Sacramento. Oraciones, meditaciones y visitas (Spanish Edition) [Spanish]

¡Prepárate para vivir una experiencia espiritual única con nuestra compilación especial! Hemos reunido tres valiosos textos sobre La Hora Santa, una práctica de profunda devoción católica. Orígenes de La Hora Santa: Descubre la rica historia y significado de esta hermosa práctica. Meditaciones de Santa Margarita María Alacoque: Sumérgete en las meditaciones de esta santa, que te guiarán en un viaje espiritual profundo. Práctica de La Hora Santa en la Basílica de Santa María del Pino: Explora una versión especial de La Hora Santa según se practica en Barcelona, España. Además, hemos incluido tres obras adicionales de oración, un rosario, meditaciones y visitas al Santísimo Sacramento, diseñadas para enriquecer tu vida. Una de ellas te brinda rezos diarios para todo el mes. Esta compilación es una oportunidad única para profundizar en tu fe, conectarte con la Divina Misericordia y honrar al Santísimo Sacramento. ¡Obtén tu copia ahora para experimentar una transformación en tu vida! "La devoción de la Hora Santa tiene su origen en la oración que Jesús hizo en Getsemaní la víspera de su muerte en la noche del Jueves al Viernes Santo. Esta devoción consiste en pasar una hora en oración de las once a las doce de la noche del jueves de cada semana. Su institución es debida a Nuestro Señor, pues él mismo la pidió a su fiel sierva la Bienaventurada Margarita María, en estos términos: "Todas las noches del jueves al viernes te haré participante de aquella mortal tristeza que quise sentir en el huerto de los Olivos. Y para acompañarme en la humilde oración que presentaba entonces a mi Padre, te levantarás a las once de la noche y te postrarás con el rostro contra la tierra, tanto para aplacar la ira divina pidiendo gracia para los pecadores, como para endulzar en alguna manera la amargura que sentí con el abandono de mis Apóstoles, la que me obligó a reprocharles el no haber podido velar una hora conmigo". "No hay tal vez momento en que el corazón de Jesús haya sufrido más como en la hora de su agonía en el jardín de los Olivos. Su dolor fue entonces tan violento, que por un prodigio inaudito le causó un sudor de sangre y le arrancó estas palabras: Mi alma está triste hasta la muerte ". "Te adoramos Señor mío, Jesucristo Sacramentado, aquí y en todas las iglesias que hay en el mundo, y te bendecimos, que por tu Santa Cruz redimiste al mundo, y por tu infinita caridad te quedaste con nosotros en el Santísimo Sacramento".