Katia [Spanish]

Est bamos de luto por la muerte de nuestra madre, ocurrida el anterior, y pasamos todo el invierno en l campo, las tres solas: Macha, y yo. Macha era una antigua amiga de la casa; hab a sido nuestra aya, hab a educado a todas. Mis recuerdos, as como mi afecto por remont banse tan lejos como los recuerdos de m misma. Sonia era mi hermana menor. oto o Sonia y nos ella, El invierno transcurri para nosotras sombr o y triste, en nuestra vieja morada de Poltrovski. El tiempo fue tan fr o y ventoso, que la nieve lleg a amontonarse a mayor altura que las ventanas, las cuales estaban casi continuamente cubiertas de hielo y empa adas; por otra parte, apenas pudimos salir a pasear durante casi toda la temporada. Era muy raro que viniera alguien a vernos, y quienes nos visitaban no tra an alegr a ni jovialidad a nuestra casa. Todo ofrec an: un rostro apenado, hablaban en voz baja, como si tuviesen miedo de despertar a alguien; procuraban no re r; suspiraban y, a menudo, lloraban al mirarme, sobre todo a la vista de mi pobre Sonia, vestida con su trajecito negro. En la casa todo revelaba, de una u otra manera, la muerte cercana; la aflicci n y el horror de la p rdida flotaban en el aire. El cuarto de mam segu a cerrado, y yo sent a un malestar cruel, a la par que un deseo irresistible de dirigir una furtiva mirada al interior de aquel fr o y desierto aposento, cuando pasaba cerca del mismo al irme a acostar.